Origen

Las raíces del cold brew se remontan a principios del siglo XIX, cuando los marineros y viajeros preparaban café en barriles con agua fría durante largos viajes marítimos. Sin embargo, el cold brew no ganó popularidad generalizada hasta principios de la década de 2010, cuando las cafeterías artesanales comenzaron a experimentar con diferentes métodos de preparación de café frío.

Descripción

El cold brew se puede preparar con cualquier tipo de café molido, pero se recomienda usar un molido grueso para evitar la sobreextracción. El café molido se mezcla con agua fría o a temperatura ambiente y se deja reposar durante un período prolongado, generalmente de 12 a 24 horas. Durante este tiempo, los sabores del café se extraen lentamente, creando un concentrado de café suave y con menos acidez. Una vez que se ha completado la infusión, el café concentrado se filtra y se puede servir solo, diluido con agua o leche, o utilizado para crear una variedad de bebidas frías de café.

Instrucciones de preparación - 2 Tazas

Ingredientes:
- 20 gramos de café molido (molienda media-fina)
- 200 ml de agua fría y un par de hielos
- Filtro de papel o tela para la cafetera

Preparación:
- Agrega el café molido a la jarra o recipiente, primero pon el filtro en el fondo del recipiente.
- Llena el depósito superior con agua fría. Puedes agregar hielo si deseas un café más frío.
- Abre la válvula en la parte inferior del depósito de agua. Esto permitirá que el agua gotee lentamente sobre el café molido.
- Deja que el café gotee durante 3-4 horas. El tiempo de infusión puede variar según tus preferencias. Una vez que el café haya terminado de gotear, cierra la válvula en la parte inferior del depósito de agua
- Retira el portafiltro de la jarra de vidrio y disfruta de tu café cold brew frío y delicioso!

El cold brew es una excelente manera de disfrutar de una taza de café especial suave, menos ácida y con un sabor único. Su método de preparación lento y a baja temperatura produce un café con un perfil de sabor complejo que se puede disfrutar solo o usarse para crear una variedad de bebidas frías de café. Si buscas una experiencia de café refrescante y diferente, el cold brew es definitivamente una opción que vale la pena probar.

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